Una señora pidió a sus tres
hijas que cuando se casaran la
llamaran al día siguiente de la primera noche para contarle lo
más disimuladamente posible sobre el desempeño sexual
de sus maridos.
Luego de su primera noche, la
hija mayor la llamó y sólo
le dijo: "Café Cabrales". La señora quedó confundida, hasta
que más tarde vió un anuncio de Café Cabrales que decía: "Satisfacción
garantizada hasta la última gota".
Tiempo después se casó su
segunda hija, y a la mañana
siguiente la llamó para decirle entre suspiros: "Colchones Simons".
La mamá buscó la publicidad de colchones Simons y leyó
complacida: "Vive la vida
con tu king zize" (extra grande).
Por último se casó la hija menor, que sólo la llamó una semana después, y casi sin voz le susurró: "Aerolíneas Argentinas". La mamá buscó frenéticamente un anuncio de Aerolíneas > Argentinas, y antes de desmayarse leyó: "5 veces al día, 7 días a la semana, ambas rutas"